Fue propuesto en 2022 como candidato a Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, pero la Comisión Nacional de la Unesco rechazó la candidatura.
Hay una escena de la película «Comer, rezar, amar», basada en la historia de la escritora Elizabeth Gilbert, en la cual la actriz Julia Roberts, que interpreta el personaje de Liz, viaja a Italia con la intención de recuperar las riendas de su vida, tras la separación abrupta de su marido.
A dos semanas de su llegada a Roma, la protagonista va a un bar y conoce de forma inesperada a Sophie, una de sus confidentes más importantes. En esa escena, ordena un típico café italiano, dejando ver, entre cierto alboroto y sobresalto, parte del frenesí que viven los italianos por el café.
Quizás por ello, y por lo que significa como símbolo de tradición, el espresso fue propuesto como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Sin embargo, la Comisión Nacional de la Unesco rechazó en marzo de 2022 la candidatura del «café expreso italiano entre cultura, rituales, socialidad y literatura en comunidades emblemáticas de Venecia a Nápoles».
En aquella oportunidad se aprobó, en cambio, la candidatura de «el arte italiano de la ópera».
El café italiano, un verdadero rito
«En Italia el café es un verdadero rito, es parte de nuestra identidad nacional y una expresión de nuestra socialidad que nos distingue en el mundo», había expresado el senador italiano Gian Marco Centinaio, al celebrar la «unanimidad» por la que había sido aprobada la candidatura por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Bosques (Mipaaf).
«Para todos los italianos, la taza de café espresso es un ritual social y cultural que se refleja también en la literatura y que fascina a todo el país, desde Nápoles a Venecia, pasando por Roma y Milán, hasta Trieste»
Gian Marco Centinaio
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Angelo Moriondo y el café espresso
No se puede hablar del café espresso sin mencionar a Angelo Moriondo, el visionario italiano que patentó la primera máquina de café espresso en Italia. Su invento revolucionario allanó el camino para la cultura del café tal como la conocemos hoy en día.
Nacido en Turín el 6 de junio de 1851, Moriondo creció en una familia de emprendedores. Su abuelo fue el fundador de una empresa de licores y luego su padre, junto a su hermano y primo, fundó en 1850 la conocida fábrica de chocolate «Moriondo e Gariglio”.
El invento de Moriondo
Siguiendo los pasos de su familia, Moriondo compró el Grand-Hotel de Liguria, en la Piazza Carlo Felice, y el bar americano de la Galleria Nazionale, en Vía Roma. Así, de la mano de la hotelería, apareció una necesidad y con ella, nació el invento.
Para que los clientes no tuvieran que esperar demasiado tiempo, desarrolló una máquina para la producción de «café instantáneo» para preparar varias tazas al mismo tiempo y hacerle frente a la competencia. La máquina consistía en una caldera y un sistema de tubos que permitía hacer café utilizando vapor y agua.
Primera máquina de café espresso
La primera máquina de café espresso fue presentada en la Exposición General de Turín en 1884 y premiada con una medalla de bronce. Esta máquina, que utilizaba vapor para producir café rápidamente, marcó el inicio de una nueva era en la preparación del café.
La patente de la primera máquina de café espresso se tituló «Nuevas máquinas de vapor para la preparación económica e instantánea de bebidas de café, método ‘A. Moriondo'» y sentó las bases para el desarrollo posterior de la cultura del café en Italia y en todo el mundo.
¿Cuándo se creó la máquina de café espresso?
La primera máquina de café espresso fue presentada en la Exposición General de Turín en 1884 y premiada con una medalla de bronce.
El país con más sitios declarados por Unesco
Italia es actualmente el país con mayor número de sitios incluidos en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, con un total de 58 sitios.
En el siguiente mapa, propuesto por Rai Cultura, aparecen todos los lugares listados.
