Cada 13 de diciembre se celebra en Italia y el mundo la «Santa de la Luz», patrona de Siracusa, pero también de los ojos, oftalmólogos, ciegos y electricistas.
Se la conoce como la «Santa de la Luz» y es una de las mártires más celebradas en Italia y en el mundo. Es la patrona de los ojos, de los oftalmólogos, de los ciegos y de los electricistas, pero también de Siracusa, su ciudad natal.
Allí, Santa Lucía viene conmemorada cada 13 de diciembre, con procesiones y celebraciones que se extienden hasta el 20 de diciembre como parte de una larga tradición. El día de culto no es al azar. Fue en esa fecha cuando ocurrió el martirio en el año 304 d.C.
Lucia, la santa de la Luz
De Santa Lucia de Siracusa se dicen muchas cosas: que pertenecía a una familia noble de Siracusa, que su madre se llamaba Eutiquia y que su padre murió cuando la beata tenía cinco años.
El nombre de Lucia quiere decir “luz” y es un nombre cristiano. De Lucia se decía y se dice aún que ilumina el invierno después de la noche más larga de oscuridad y que el 13 de diciembre es “el día más corto que existe”, pero en realidad no es así, porque la noche con menos luz del año, ocurre entre los días 21 y 22 de diciembre.
La historia de San Lucia de Siracusa
La historia cuenta que la joven planeaba consagrarse a Dios, pero madre la prometió como esposa a un joven no cristiano. Con el deseo de que ese plan no suceda, se dice que la santa pospuso la boda con distintos pretextos. Hasta que sucedió un evento imprevisto en Catania.
Allí viajaron Lucia con su madre el año 301 para visitar el sepulcro de Santa Águeda y pedir la curación de Eutiquia, que sufría de diversas hemorragias. Se dice que Lucía y su madre se acercaron hasta la sepultura de Águeda y la joven le pidió a su madre que tocara la tumba para curarse. Y entonces, en una estado de trance, se le apareció la santa y le dijo lo siguiente:
“Lucía, hermana mía y virgen del Señor, ¿por qué me pides lo que tú misma puedes conseguir? Tu fe ha sido de gran ayuda para tu madre, ella está ya curada. Te has consagrado a Dios en la virginidad y por eso, así como para mí la ciudad de Catania está repleta de las gracias del cielo, para ti así lo estará la ciudad de Siracusa»
El martirio de Santa Lucia
De acuerdo la leyenda, fue luego de ese episodio que Lucia le contó a su madre su propósito de anular su matrimonio y dedicar su vida a los pobres y más débiles. A raíz de ello, el joven con el cual se iba a casar, denunció a Lucia y la acusó de rendir culto a Cristo y desobedecer las normas de la ley. Fue arrestada, declarada culpable y ordenaron llevarla a un prostíbulo, pero los soldados –según el relato– no lograron moverla. Entonces, decidieron torturarla y quemarla viva, pero como el fuego no le hacía daño, terminaron decapitándola un 13 de diciembre de año 304 d.C. Hay fuentes que relatan que, en cambio, fue degollada. Lo cierto es que, desde aquel entonces, el culto a Santa Lucia se extendió y la «Santa de la Luz» se celebra en todo el mundo.
La celebración de Santa Lucia en Italia
Santa Lucia es festejada en toda Italia. En Siracusa, ciudad de la que es patrona se realizan distintas procesiones que se extienden durante varios días y según algunos periódicos locales, es parte de la tradición comer especialmente en Palermo los famosos arancine, uno de los platos típicos de Sicilia. También la celebran en las provincias de Verona, Brescia, Mantova y Cremona, según el periódico Corriere della Sera, con fiestas para los más niños y platos típicos, como galletas recubiertas con azúcar que también se hacen en moldes navideños.
Santa Lucia de Siracusa en el mundo
Homenajear a Santa Lucia es también pedir luz, como lo dice su nombre. En el mundo es celebrada en Suecia, con una importante procesión conocida como «Luciatåget» en la cual niñas visten de blanco y llevan una corona de velas. Pero también Santa Lucia de Siracusa se festeja en Dinamarca, Rusia, Polonia, España, Argentina, entre otros países, con misas, procesiones y festejos. En Buenos Aires, por ejemplo, se encuentra la iglesia de Santa Lucia, en el barrio porteño de Barracas, donde se construyó el primer oratorio en su honor en el año 1783.
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El robo del cuerpo de Santa Lucia
Para curiosidad de muchos, el cuerpo de la santa italiana fue robado por los bizantinos en el 1000, pero sus restos retornaron con la conquista de Constantinopla y desde entonces se encuentran en Venezia. Cada diez años el cuerpo de Santa Lucia vuelve temporalmente a Siracusa. La próxima cita será en diciembre de 2024, luego de la primera visita histórica en 2004 y la siguiente en el 2014, de acuerdo al portal Siracusa Oggi.
Actualmente sus restos se conservan en la iglesia de San Geremia, en el barrio de Cannaregio de Venezia. En el 1279 el cuerpo se trasladó a una parroquia que fue renombrada con el nombre de Santa Lucia, pero en el 1860, cuando se construyó el ferrocarril, la iglesia fue demolida y sus restos mortales fueron llevados a San Geremia el 11 de julio de 1860 (también Santuario di Lucia).
Aunque su cuerpo reposa en esa iglesia de Venezia, el lugar principal de culto es la iglesia de Santa Lucia al Sepolcro, en su ciudad natal, en Siracusa, Sicilia. La estación de tren de Venezia lleva el nombre de «Santa Lucia» en conmemoración a la santa italiana, portadora de la luz.
